Contracción prosténica en el sapo Bufo Marinus obtenida con descargas rítmicas de condensadores
“He revisado la literatura científica mundial desde 1.879 hasta la fecha y ningún otro autor había descrito el fenómeno que he denominado CONTRACCIÓN PROSTENICA. Este fenómeno que hallado por mí en la colaboración de la Facultad de Medicina de Bogotá en 1.932. Su inscripción preliminar constituyó el tema de trabajo premiado en el concurso abierto de la facultad de 1.933. … en los años siguientes continué su estudio y logré descubrir su causa (1.934). En 1.935 constituyó el tema de mi tesis de grado FISIOLOGÍA GENERAL DE LA CONTRACCIÓN PROSTENICA habiendo sido laureada…
En París (1.936) continue su estudio en el laboratorio de Fisiología de la Sorbona, bajo la dirección del profesor Luis Lapicque, indiscutiblemente la primera autoridad mundial en fisiología de la contracción muscular. Allí empleé aparatos de mayor precisión y logré demostrar su existencia en la Rana osculenta, ya que en Bogotá la había encontrado en otra variedad de rana, la Hyla labialis. Posteriormente controlé con el osciloscopio catódico la uniformidad de las descargas de condensadores, siguiendo en esto la insinuación del profesor Lapicque...
En el presente trabajo se demuestra la existencia de la “contracción prosténica” en otra variedad de sapos, el Bufo marinus empleando otra clase de excitación, por descargas de condensadores producidos por el conmutador rotatorio de la Casa Palmer, de Londres pedido expresamente con este fin. Por lo tanto puedo afirmar que este trabajo es completamente original e inédito, hasta donde mis conocimientos me permitan afirmarlo.
Hasta el momento este fenómeno pertenece a la llamada ciencia pura, pues no ha tenido aplicación práctica. Es un fenómeno nuevo en Fisiología, que debe figurar al lado de otras formas de contracción muscular: a saber sacudida simple, tétanos perfectos, tétanos imperfectos y tétanos rítmicos. Pero como pasa siempre con los fenómenos de ciencia pura creo que pronto tendrá aplicación práctica, y en ello estoy ahora empeñado, en aplicarlo para corregir los trastornos del ritmo cardíaco, tales como la fibrilación ventricular y el paro cardíaco. Los primeros ensayos que he hecho me permiten ser optimista al respeto respecto…”
Tomado de la investigación que participó en la convocatoria.